Por Qué Se Desploma El Precio Del Petróleo Y No La Gasolina

Todos hemos escuchado alguna vez que los precios suben en ascensor y bajan por la escalera. Este refrán nos servirá de base para comentar el por qué el precio de la gasolina no baja a la velocidad que lo hace el petróleo.

El petróleo en lo que va de año se deja ya más de un 30%, mientras que la gasolina apenas llega al 10%. Esta diferencia, ¿a qué se debe?

En primer lugar, habría que señalar que la gasolina con la que llenamos el depósito del coche es un derivado del petróleo. Es un producto elaborado que contiene en su precio costes asociados, como la mano de obra, el transporte, etc. Todo producto derivado siempre variará de forma distinta al precio de la materia prima.

En segundo lugar, habría que mencionar que la composición del precio de la gasolina está fuertemente distorsionada por el Estado, es decir, por los impuestos.

Como podemos observar en el gráfico, la mitad del precio de la gasolina son impuestos. Por tanto, como el petróleo representa una parte pequeña del coste final de los carburantes, aunque caiga el precio bruscamente no se ve afectado en la misma medida el precio final de la gasolina.